Taller de cajas nido II: La madera.

     En la construcción de cajas nido se pueden utilizar multitud de materiales, pero es la madera una de las más utilizadas dada la su facilidad de utilización y el precio relativamente barato. De todas formas soy partidario de la reutilización para esto y para muchas otras cosas. Hay que optimizar los gastos, que no está el tema para dispendios injustificados.

     Vamos pues a tocar hoy el tema de la madera. En primer lugar lo que no hay que usar nunca, ni aglomerados ni DM. Ambos son tableros muy fáciles de trabajar, pero le tienen alergia al agua, y nuestras cajas van a la intemperie. El aglomerado está fabricado con viruta de madera encolada y prensada, y aunque en el mercada la hay con un recubrimiento hidrofugante, no es buen material para la fabricación de cajas nido. El DM es un aglomerado fabricado con fibras de madera, resinas y calor hasta conseguir un tablero de densidad media (dm), igualmente es muy fácil de trabajar, pero el agua y la humedad hace estragos en ellos.

     Entonces, ¿qué madera puedo utilizar?. 

1.- Madera maciza. El pino es lo más barato. Es una buena opción, pero a mí me gusta que sea de una sola pieza. En los almacenes tienen maderas de hasta unos 20 cm de ancho, pero en estos casos suelen ser bastante gruesas 20-25 mm, lo que muchas veces es demasiado grueso. En almacenes de bricolaje tienen tableros hechos con tablas encoladas de un menor grosor, pero el precio sube bastante, por lo que yo no las utilizo.

Caja nido para primilla. Hecha con madera maciza.

Otra opción baratita es la utilización de tablas de palet. Pueden estar cortadas de distintas maderas como pino o chopo y de mejor o peor calidad. El problema es que no hay tablas de anchura suficiente para hacer cajas, ni siquiera para passeriformes, de una sola pieza, por lo que las tenemos que unir, bien encolando, bien atornillando. En el primer caso aumenta las horas de mano de obra, y con el tiempo (no demasiado) se despegará. En el segundo caso, al tener que superponer tablas para poder atornillar, el resultado son cajones demasiado pesados y bastos.

Caja de primilla. Hecha con tablas de palet. Hubo que reforzarla porque las tablas se despegaron.

2.- Contrachapado. Son tableros fabricados con varias láminas de madera y pegadas con resinas sintéticas y calor. De esta forma se mejora notablemente la estabilidad dimensional del tablero obtenido respecto de madera maciza. En este caso es necesario, al igual que con la madera maciza, darle una capa de algún producto hidrofugante. Estos tableros los encontramos en distintos grosores. Además mi proveedor me lo corta a la medida que quiera, con lo que llevando claro el despiece, me lo llevo cortadito, solo a falta de ensamblar. La durabilidad de esta opción es grande.

Caja nido de contrachapado.

3.- Tablero fenólico. Son tableros del estilo al anterior pero utilizan resinas fenólicas tanto para unir las láminas como los exteriores, son los utilizados para encofrar muros o para los suelos de los remolques de los camiones. La ventaja de este tipo de madera es que es muy, pero muy duradera a la intemperie. Sólo hay que hidrofugar los cantos. 

La madera de los paneles de encofrar, una vez desechados por el constructor, es una opción de reutilización fantástica. A mí me regalaron casi 30 tableros de 3 x 1,5 metros, que una vez saneados nos ha dado para hacer un buen montón de cajas que durarán muchos años sin apenas mantenimiento.

Caja de primilla. Fabricada con madera fenólica reciclada.